Descripción
RESEÑA:
Existe belleza en las miserias del ser humano. O no. Sobre poesía no hay nada escrito, y en unos tiempos donde prolifera la lírica que mira por lo bello de la vida, conviene también no descuidar la parte cruda y mísera de esta. Versos nacidos desde el dolor, la ira, el desengaño, la tristeza, el desamor y, por supuesto, el amor. Versos etílicos, en los que cada gota de sangre mezclada con alcohol impregna cada hoja tratando de expresar a modo de poesía lo que una destartalada cabeza piensa. Porque si de algo trata la poesía es, precisamente, de expresar sentimientos. Y estos son retorcidos, indescifrables, crípticos y, sobre todo, personales, pues no hay un sentimiento igual en cada persona. Así pues, este puñado de versos apilados en poemas suponen un intento (quien sabe si exitoso) de representar la cruenta batalla entre mente, corazón y alma. Estos versos son el sonido del viento que escucharás acompañándote si te decides a pasear por los senderos de la destrozada mente del que los firma. Estas estrofas son recitadas al oído del lector, con una voz salida de las mismísimas entrañas. Estos poemas, en definitiva, son un pedazo de un alma hecha jirones y que trata irremediablemente de zurcirse a golpe de verso. Adelante, valiente, pues solo aquellos que no temen enfrentarse a las miserias del ser humano podrán encontrar satisfacción en estas palabras.
EL AUTOR:
Daniel Viñambres Martínez, nacido una fatídica tarde de julio en el 94. Alcorconero de nacimiento, pero con Pobladura de la Sierra y Valdemanzanas de Somoza en el corazón, junto con toda la maragatería. De formación sociólogo, pero con alma de poeta. Nunca se interesó por las grandes cosas, sí por los pequeños detalles. Dicen de él que es un buen tipo, pero prefiere no vanagloriarse de ello y dejar esas cosas en boca de otros, que siempre suena mejor. Melancólico o triste, según se mire, pero jamás negará una sonrisa a su familia ni a sus amigos, en los que piensa como compadres. Aficionado a compartir cervezas rodeado de estos últimos, difícilmente rechazará una invitación.
Soy escritora, conferenciante y coautora del libro 100 mensajes para mis hijos.
Lidero un servicio de acompañamiento lingüístico (www.tuvozenmipluma.com) en el que mentorizo el desarrollo de proyectos de literatura consciente.